El Castillo Chamerolles
El Castillo de Chamerolles esta situado en el Valle del Loire, Francia, este es bien conocido como “ El Castillo del Perfume”, es una mansión con aires de fortaleza con jardines especialmente diseñados con plantas aromaticas y en el interior del mismo se encuentra el Museo del Perfume.
Un recorrido a lo largo de la historia de las fragancias aromáticas transporta al visitante al siglo XVI y le lleva a descubrir la evolución de los perfumes hasta la actualidad. Recorrer las estancias del castillo es ver una recreación de los procesos de fabricación de perfumes y esencias a lo largo de la historia.
En el museo se pueden observar las distintas técnicas de fabricación de perfumes y productos de higiene desde el siglo XVI, así como las distintas costumbres higiénicas a lo largo de los siglos, que estaban muy relacionadas con la manufactura de fragancias. Tambien se pueden oler los perfumes de aquella epoca, donde prevalecia los aromas de Lavanda, Menta, limon, etc.
De este modo, por ejemplo, se entiende que en los años en los que la destilación de esencias proliferó, el hábito de los baños disminuía. Cuentan las crónicas que el Rey Sol, Luis XIV se bañó una sola vez en su vida por recomendación de los médicos, ya que por aquel entonces, se tenía la creencia de que al dilatarse los poros de la piel después del baño, ésta era más vulnerable al ataque de las enfermedades. Como lógica contrapartida, la fabricación de fragancias creció espectacularmente en el siglo XVII.
Un recorrido a lo largo de la historia de las fragancias aromáticas transporta al visitante al siglo XVI y le lleva a descubrir la evolución de los perfumes hasta la actualidad. Recorrer las estancias del castillo es ver una recreación de los procesos de fabricación de perfumes y esencias a lo largo de la historia.
En el museo se pueden observar las distintas técnicas de fabricación de perfumes y productos de higiene desde el siglo XVI, así como las distintas costumbres higiénicas a lo largo de los siglos, que estaban muy relacionadas con la manufactura de fragancias. Tambien se pueden oler los perfumes de aquella epoca, donde prevalecia los aromas de Lavanda, Menta, limon, etc.
De este modo, por ejemplo, se entiende que en los años en los que la destilación de esencias proliferó, el hábito de los baños disminuía. Cuentan las crónicas que el Rey Sol, Luis XIV se bañó una sola vez en su vida por recomendación de los médicos, ya que por aquel entonces, se tenía la creencia de que al dilatarse los poros de la piel después del baño, ésta era más vulnerable al ataque de las enfermedades. Como lógica contrapartida, la fabricación de fragancias creció espectacularmente en el siglo XVII.
